“Cuando se instaló la estación del ferrocarril (en Guatemala), comenzó el crecimiento comercial de esta área; y ese fue el motivo que propició la construcción de hoteles. Entender esta parte histórica es importante para las y los camaristas, pues son quienes tienen contacto con los huéspedes”, con esta explicación del instructor José Guzmán comenzó la visita guiada en la que participaron las adolescentes que forman parte del curso de gestión de habitaciones y áreas públicas.
El proceso de formación se realiza como parte de las actividades del departamento de Vida Independiente, un programa de la Dirección de Protección Especial Residencial Hogar Seguro Virgen de la Asunción que tiene como objetivo principal preparar a las y los adolescentes para tener una vida autosuficiente cuando sean mayores de edad.
Karen Quezada, jefa del departamento, indicó que este se desarrolla con apoyo del Intecap como parte del seguimiento al curso de Marinos Mercantes, en el que participaron las adolescentes el año pasado. Además, en este se incluye a otras adolescentes que no fueron parte de la capacitación inicial.
“Con el curso de gestión de habitaciones tienen más conocimientos que serán ventajas competitivas al momento que participen en una convocatoria laboral cuando sean mayores de edad, especialmente a quienes ya tomaron el curso de Marinos Mercantes en la Escuela Naval”, explicó Quezada.
Experiencia en voz de los expertos
La formación como gestoras de habitaciones o recamareras implica conocer cuáles son los procedimientos de limpieza, montaje y desmontaje de una habitación, razón por la que se realizó una visita al hotel Ajau Colonial, para conocer de cerca estos procedimientos.
José Roberto Guzmán, instructor de hotelería y turismo del Intecap, señaló que a partir de esta experiencia las y los estudiantes tienen un panorama más amplio de lo que aprenden en clase y también visualizan otros aspectos interesantes de cómo realizar algunas actividades sin molestar al huésped.
“La hotelería y turismo son carreras muy bondadosas que le dan empleo a miles de personas desde muchos años. Esta es una carrera en la que se puede crecer a un nivel ejecutivo alto, pero depende de cada persona y su disponibilidad para aprender desde un principio”, expresó el educador.
Para Helen* (nombre ficticio) uno de los aspectos que más le interesa del curso es el nivel de detalle que hay en cada procedimiento que se realiza en los hoteles para la adecuada atención de los huéspedes.
“Lo que uno aprende es que la gente debe sentirse cómoda y que el lugar sea apto para ellos. Creo que este tipo de carreras le dan a una la oportunidad de comunicarse y socializar con la gente y pienso que me gustaría trabajar en hoteles grandes con días bastante activos, con un ritmo rápido”, expresó Helen respecto a sus deseos futuros.
Texto: Cecilia García
Fotografías: Cecilia García y José Dávila
Video: Rudy Hernández