Con entusiasmo y ansias de aprender, un grupo conformado por 50 mujeres y un hombre participó activamente en el taller de primeros auxilios diseñado específicamente para su rol como futuro niñero y niñeras certificadas.
Determinadas a convertirse en las guardianas de la seguridad y bienestar para los pequeños a su cuidado, el grupo se adentró a la práctica de las respuestas efectivas y rápidas como clave para enfrentar cualquier emergencia.
María Alejandra Muralles, directora de Primera Infancia de la SBS, explicó que este módulo sobre primeros auxilios es muy importante dentro del Diplomado ya que todas las personas que trabajan con primera infancia deben tener un conocimiento profundo de cómo ser una primera respuesta en caso de emergencia.
Entre risas y concentración, sumaron conocimientos vitales sobre signos y síntomas, aprendieron a realizar evaluaciones primarias y dominaron la técnica de medición del pulso y la respiración, habilidades fundamentales que les permitirán actuar ante cualquier eventualidad que lo requiera.
Pero este taller no se limitó a la teoría; lejos de ello, las mujeres se encontraron inmersas en un escenario práctico que les permitió poner a prueba sus nuevos conocimientos en un ambiente controlado. Desde cómo utilizar los recursos a mano para elaborar un cabestrillo, hasta maniobras de RCP.
Claudia Palacios, una de las participantes, expresó que ha aprendido muchas cosas dentro del Diplomado. “El curso de primeros auxilios me gustó mucho porque a veces uno no sabe cómo reaccionar en mi caso yo me metí al Diplomado porque en donde estaba trabajando necesitaban que las niñeras fueran certificadas y desde que me inscribí he sumado experiencias y conocimientos”, indicó.
Guiadas por Julio y Raúl, expertos en la materia y miembros de Bomberos Sin Fronteras, estas futuras niñeras certificadas no solo adquirieron habilidades prácticas, sino también la confianza necesaria para actuar con determinación ante cualquier emergencia que pueda surgir.
Al final del taller, el grupo quedó satisfecho y con la certeza de que estaban mejor preparadas para enfrentar los desafíos que les deparará su noble labor como niñeras certificadas, llevando a cabo no solo una trabajo de cuidadoras, sino también de guardianas de la seguridad y bienestar de la primera infancia.
Texto: Carolina Hernández
Fotos: Eduardo Mendoza