Las residencias a cargo de la Subsecretaría de Protección de la Secretaría de Bienestar Social -SBS- cuentan con programas que ofrecen espacios de atención espiritual para que las y los jóvenes encuentren apoyo que les ayude a regresar a sus hogares.
Las guías espirituales son impartidas por personal de Familia SBS y son las y los jóvenes quienes deciden por voluntad propia participar en estos espacios, en los que se respetan los valores y creencias de cada uno.
El motivo principal de estos espacios es realizar un acompañamiento más allá de lo psicológico y ocupacional, en el que cada adolescente pueda expresar sus emociones para hacer un mejor manejo de estas, contibuyendo así a avances en temas como el perdón, el dolor y la aceptación propia.
El secretario Francisco Molina participó durante la sesión recibida por las adolescentes de la residencia de protección Zarifo III, haciendo una supervisión de la actividad. “Hemos podido experimentar muchísimas emociones, pero sobre todo pudimos ver el interés superior de que ellas estén bien”, comentó.
“Se siente bien, uno se siente cómodo porque nos visitan de la iglesia y nos dan tiempo para hablarles y para preguntar dudas que tenemos nosotras. Varias se desahogan, algunas lloran porque sienten un alivio al momento de hablar con ellos”.
*Luisa, residente de Zafiro III.
Los espacios de atención espiritual forman parte de los programas de todas las residencias de protección de la SBS y en muchas ocasiones cuentan con invitados de distintas congregaciones religiosas del país.
