El encierro, hacinamiento y ocio en los centros de reclusión para adolescentes en conflicto con la ley penal, pasarán a ser parte del pasado con la puesta en práctica del Nuevo Modelo de Gestión Juvenil, que impulsa la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia –SBS-, por medio de la Subsecretaría de Reinserción y Resocialización de Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal.
Este proyecto basado en un régimen semi abierto, es el único a nivel centroamericano y empezará a funcionar en Casa Intermedia, cuyas instalaciones ya han sido remodeladas en un 95% y estarán listas a partir de abril.
El subsecretario de Reinserción, Francisco Molina, explicó que con este régimen, los jóvenes tendrán la oportunidad, si un juez lo ordena, de salir a trabajar o estudiar durante el día y regresar a pernoctar.
Mientras que para quienes se queden en el centro, las actividades enfocadas en la capacitación, empezarán desde las cinco de la mañana y finalizarán a las nueve de la noche para evitar el ocio.
De acuerdo con Molina, Casa Intermedia tendrá capacidad para 60 privados de libertad, que previamente serán perfilados con una herramienta creada por los profesionales que trabajan a diario en los centros de reclusión y que fueron capacitados en el extranjero para poner en práctica el Nuevo Modelo.
Casa Intermedia constará de seis cabañas que podrán albergar hasta a diez jóvenes, y cada una tendrá comedor, sala social, duchas, baños y habitaciones. “Entrar en estos centros será un incentivo porque sentirán al cambio, habrá una verdadera rehabilitación, la atención será constante, no habrá hacinamiento y no solo serán actividades laborales, sino también afectivas”, indicó Molina.
Mientras que para finales de año se espera que estén terminadas las instalaciones del Centro Especializado en Reinserción (CER), que albergará a 400 privados de libertad, también bajo las reglas del Nuevo Modelo de Gestión Juvenil, allí los internos serán divididos en dos alas. Ambos centros están ubicados en el municipio de San José Pinula en instlaciones propias de la SBS.
Según Molina, la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley –INL- de la Embajada de Estados Unidos financió el proyecto, además de dar la asesoría técnica a trabajadores de la Subsecretaría de Reinserción. “La inversión es de 3 millones de dólares para remozar los dos centros de privación de menores y cuatro sedes de medidas socioeducativas”, aseguró.
En estos nuevos centros, los jóvenes internos tendrán una verdadera rehabilitación y herramientas para su reinserción en la sociedad. “Nos vamos a enfocar en darles una segunda oportunidad a estos adolescentes que cometieron errores, pero que todavía podemos rescatar para que no pasen al Sistema Penitenciario y que saquen su talento interno”, finalizó el Subsecretario.
