En la búsqueda de una debida protección y facilitación de un entorno adecuado de los Niños, Niñas y Adolescentes -NNA-, imposibilitados de vivir con su familia biológica, una de las opciones más favorables es la integración de los menores con su familia ampliada, que pueden ser parientes como tíos y primos o por afinidad como padrinos o vecinos.
Esta opción ha permitido a *Denis, un pequeño de 3 años, encontrar en la casa de su madrina, el espacio para crecer sano y feliz y, con ello, evitar su permanencia en alguna institución gubernamental, puesto que carecía de núcleo familiar idóneo.
Doña Graciela cuenta que hace dos años, le preguntaron si quería hacerse cargo de su ahijado, situación que aceptó con incertidumbre, porque con su esposo ya no tenían responsabilidad. “Mi hijo más pequeño tiene 34 años, imagínese”, explica.
Con el aval de un juzgado, le abrió las puertas a Denis, cuyo caso es seguido de cerca por colaboradores de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia –SBS-, de la Sede Departamental en Guatemala, en donde le brindan atención psicoterapéutica y supervisan que tenga acceso a servicios de educación y salud.
Además, la SBS le ha dado asesoría a doña Graciela, por medio del Programa Educando en Familia, en donde la han orientado sobre maternidad responsable, cuidados que requiere un menor de edad, organización del tiempo y cumplimiento de metas, con el propósito de que pueda darle un mejor entorno al nene.
“Es como empezar de nuevo, porque era un bebé cuando me lo dieron, por eso las clases me han ayudado a recordar cómo criar a un niño de mejor manera, pues me han enseñado a tenerle paciencia”, indica.
La madre de *Denis estuvo bajo medidas de abrigo y protección de la SBS, pero en febrero de 2017 un juez resolvió que no era un recurso idóneo y desde entonces la madrina es quien se ha encargado de su cuidado y atención.
Doña Graciela dice que la muchacha tiene permiso del juez para visitar a su hijo, pero no le permiten llevárselo porque no es apta para tenerlo, además su presencia influye negativamente en el comportamiento del pequeño.
“Durante el tiempo que el nene ha estado con nosotros ya nos reconoce como su familia, a mi esposo le dice ‘papito’, dice que mis hijos son sus hermanos, se siente bien; nosotros ya nos adaptamos a él, nos costó un poco al principio, pero ahora ya es parte de nuestra familia, lo queremos mucho”, finaliza.
*Denis también forma parte del programa de Subsidios Familiares, que apoyan a menores de edad que han sufrido de vulneración de sus derechos y durante cuatro años, su familia ampliada recibirá Q500 mensuales, como apoyo para brindarle una mejor calidad de vida.
*Nombre ficticio para guardar la identidad del menor