Que Ester tenga cinco años es un milagro, porque nació a los seis meses de gestación, pesando tres libras, con síndrome de Down y una deficiencia cardiaca que casi le cuesta la vida; sumado a eso, su madre no contaba con el apoyo de una pareja y su situación económica era difícil en su natal San Benito, Petén.
Sin embargo, hace tres años Virginia encontró en el programa de Subsidios Familiares, de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia –SBS-, un alivio ante la angustia de perder a su pequeña hija.
Hoy Virginia radicada en la aldea Chajkej Chanyuc, de San Pedro Carchá, Alta Verapaz, cuenta que cuando Ester era una bebé su desesperación por salvarla la llevó a pedir ayuda al Juzgado de la Niñez de San Benito, en donde tras evaluar su caso, se ordenó la intervención del programa a cargo de la Subsecretaría de Preservación Familiar, Fortalecimiento y Apoyo Comunitario.
“Yo soy madre soltera, no tenía trabajo y la salud de la bebé era muy delicada, hasta me pidieron que la regalara porque el medicamento que le recetaron era muy caro, pero gracias a Dios con la ayuda que me han proporcionado he podido comprarle la medicina”, narra la madre.
Conforme han pasado los años, Ester se ha ido fortaleciendo y pasó de mantenerse solamente acostada, a ser una niña activa que come sola y está a muy poco de dar sus primeros pasos, además, su corazón es más vigoroso y ya no necesita el costoso fármaco que debía ingerir.
Virginia dice que con la apoyo económico de Q500 que recibe mensualmente del subsidio que le da la SBS, puede comprarle alimentos a su niña, también puede costear los pasajes para llevarla a terapia los martes y jueves hasta el centro de Cobán y ya recibe educación especial.
Por lo menos una vez al año, debe llevar a Ester a San Benito para que la evalúen en el hospital, donde todos los médicos y enfermeras la conocen como “Milagro”, debido a lo complicado que se vislumbraba su futuro y asiste al Juzgado donde corroboran que continúa recibiendo el beneficio.
Los avances de la nena también son verificados por medio de las visitas domiciliares que realizan trabajadores sociales del Departamento de Subsidios Familiares de la SBS, cuyo objetivo es incentivar el cuidado integral y la buena administración de la ayuda. Durante la visita, Ester tomó su hora de siesta en los brazos de su madre, quien brindaba información de su progreso.
Virginia aprovechó para agradecer por el apoyo económico brindado por la SBS, porque por medio de este, ha visto muchos resultados positivos en su hija y lo más importante, pudo quedarse junto a ella.