Las expectativas sobre el nuevo Modelo de Gestión Juvenil, impulsado por la Secretaría de Bienestar Social –SBS-, son altas para los profesionales que estarán a cargo de ponerlo en práctica en Casa Intermedia, tomando en cuenta que son los pioneros a nivel regional en este innovador proyecto enfocado en una justicia restaurativa para adolescentes en conflicto con la ley penal.
Ahora con un nuevo enfoque, tras capacitarse en Guatemala y Estados Unidos, el personal bajo la supervisión de la Subsecretaría de Reinserción y Resocialización, tiene mayor confianza en que los jóvenes en conflicto con la ley penal aumentarán sus oportunidades en variados campos laborales, así como a nivel educativo, tal y como lo estipula la ley.
Para Brenda Estrada, trabajadora social que tiene un año y medio de laborar para la SBS, la formación que recibieron fue productiva, pues aprendieron cómo guiar a los adolescentes en esta nueva etapa. “Ahora nosotros seremos un ejemplo para que ellos puedan sobresalir a nivel socioeducativo”, expresó.
Entre los cambios que resaltan en este nuevo Modelo de Gestión Juvenil están el suministro de mayores herramientas para que puedan incorporarse a la sociedad de forma integral, una mayor interacción entre los Vigilantes de Tratamiento Juvenil –VTJ- y los jóvenes, así como un trato especializado y más humano.
Lilian González, otra de las trabajadoras sociales, dijo que este modelo es bastante completo porque le ayuda al privado de libertad a reinsertarse primero a su familia y después a la sociedad, de una manera adecuada para que no reincida. “Es gratificante que como profesionales nos formemos, pero también que pongamos en práctica todo lo aprendido en beneficio de estos jóvenes”, indicó.
En la parte estructural, el cambio también es notorio, pues en Casa Intermedia desaparecerán las celdas y los jóvenes estarán en espacios abiertos con el propósito de fomentar la convivencia y aplicar la prevención situacional, que se basa en observar qué está sucediendo todo el tiempo.
“Como Promoción Actitud nos sentimos agradecidos y motivados por la experiencia formativa y tenemos muchas expectativas de los resultados que arrojará el nuevo Modelo de Gestión Juvenil”, declaró Sergio Sajbin, también parte del personal que trabajará en el centro.
Para Baudilio Cabrera, quien durante casi diez años ha laborado en los cuatro centros de privación de libertad juvenil, a cargo de la SBS, el cambio es positivo porque ahora la figura de “Monitor” cambiará por la de “Educador”, lo que se traduce en una variación, no solo de nombre, sino de actitudes hacia los internos.
“Durante casi una década he vivido todo tipo de situaciones dentro de los centros, por eso me siento contento porque este nuevo modelo está enfocado en el diálogo y en el buen trato, tal y como ha sido, pero mejorado. No es fácil, es una tarea dura, pero ahora que no habrá hacinamiento será mejor”, finalizó Cabrera.
Es así como estos profesionales, quienes fueron los encargados de elaborar los diez manuales que regirán el nuevo Modelo de Gestión Juvenil, tienen puestas sus esperanzas en que este proyecto ayude a los jóvenes próximos a terminar su sanción, a tener una segunda oportunidad para reinsertarse a la sociedad y no reincidir.