ENTREGA Y DEDICACIÓN INSPIRAN Y MOTIVAN EN EL CENTRO ALIDA ESPAÑA DE ARANA

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En tan solo seis meses don Carlos Humberto se ha ganado el respeto y admiración de todos en el Centro de Educación Especial Alida España de Arana, debido a la entrega y dedicación hacia Abisaí, su nieto de 3 años.

El abuelo, como le llaman, cuenta que Abisaí nació con un problema en el brazo y pierna izquierda, lo que ocasionó que no gateara con normalidad, así como con dificultades en el desarrollo del habla. Sin embargo, hace seis meses tuvo la oportunidad de que el pequeño ingresara  al centro y desde entonces su avance ha sido a pasos agigantados. 

“Busqué ayuda en diferentes lugares, pero ninguno se adaptaba a las necesidades que tenemos. Hasta que conocí el Centro Alida España, vine a inscribirlo y luego me llamaron para contarme que ya podía traerlo”, cuenta el hombre de 68 años.

Desde entonces se le ve por los pasillos del centro, siempre con pañalera al hombro y el carruaje donde transporta a su nieto. “El año pasado venimos cuatro meses con 20 días, luego nos fuimos de vacaciones y regresamos en enero. Gracias a Dios todo ha funcionado muy bien”, cuenta.

Es así como los martes y jueves Abisaí despierta a las cuatro de la mañana. Es la hija mayor de don Carlos Humberto la encargada de bañarlo y prepararlo. “Yo bajo a traerlo a las cinco en punto, luego me pasa recogiendo un tío de él y nos viene a dejar acá, ya aquí me quedo esperando todo el proceso que le toca, a eso de las 11:30 o 12:00  ya vamos de regreso. Lo llevo en carruaje hasta la 8ª. avenida de la zona 1, nos subimos al metro que nos lleva a la zona 6, en la colonia San Juan de Dios, en donde vivimos”. 

“Le doy gracias a Dios todos los días por este niño. No caminaba y yo derramaba mis lágrimas, pero ahora ya camina, le da tres vueltas al área del centro y allá en mi casa hago la terapia con él, me camina más de un kilómetro en 30 minutos. Esto ha sido un trabajo fuerte departe mía y del centro”, expresa.

En esto coincide la educadora Mayra Gutiérrez, quien ha sido testigo de la dedicación de don Carlos Humberto. “Yo lo felicitaba porque parte de los avances del nene han sido por la constancia que él ha tenido en la asistencia al centro. Sinceramente es un abuelito muy entregado, siempre observamos como se preocupa por Abisaí”.

Mayra indica que con el pequeño trabajan fisioterapia, terapia multisensorial y recibe educación especial y tratamiento psicológico, pero señala que gran parte del trabajo recae en el empeño que los encargados de los niños ponen en el trabajo en casa. “Es por eso que ponemos de ejemplo al abuelito de Abisaí, porque venía en carruaje, no caminaba y no tenemos ni medio año de estar trabajando con él y ya vemos que ya se soltó en caminata y ya quiere pronunciar sus primeras palabras”.

Ahora, el pequeño ya dice papá, mamá, allí, allá e identifica bien lo que quiere. “No oía y ya oye, a través de Dios y las terapias ha evolucionado, estoy agradecido con Dios y con el centro. Bendiciones a todo el personal porque la preocupación, amor y felicidad para estos niños se refleja en el buen trato que les dan”, finalizó don Carlos Humberto.