La Secretaría de Bienestar Social (SBS), en colaboración con
IEPADES y UNICEF, realizó un taller de autocuidado para el personal que trabaja
directamente con niñez y adolescencia. El objetivo fue brindar herramientas
para el autocuidado y la gestión de crisis, reconociendo el impacto emocional
que conlleva su labor.

Maricruz Figueroa, Coordinadora del equipo de psicología por parte de IEPADES y UNICEF, explicó: “Estuve coordinando las acciones de un equipo de psicólogos especializados en violencia y en esta ocasión estamos terminando nuestro proyecto de atención, haciendo talleres de autocuidado a las y los compañeros de la Secretaría de Bienestar Social que han atendido distintas emergencias. Esto es parte de la respuesta del equipo porque desde los principios de la atención informada en el trauma se indica que hay que cuidar a los que cuidan para brindar un buen servicio”.









La capacitación incluyó técnicas de aromaterapia, meditación y otras herramientas para el autocuidado. Los colaboradores tuvieron efectos en su cuerpo, en sus emociones y en sus relaciones. A partir del esfuerzo que han hecho para poder dar la atención a las emergencias, la pasión que han demostrado, su compromiso y responsabilidad, debían darse un espacio para auto cuidarse, aprender técnicas a nivel físico y psicológico.
Michelle López, Analista de Recursos Humanos de la SBS, compartió su experiencia: “Ha sido una experiencia revitalizadora, mental y emocionalmente, pero que no había identificado lo mucho que me había afectado el hecho de haber estado en una emergencia. Hoy me doy cuenta, hoy lo puedo identificar y pues lo he trabajado y me voy con herramientas para poder seguir gestionando esta parte y mejorar mi salud mental”. Además, destacó la importancia de estas herramientas para su trabajo diario.

La SBS reconoce la importancia del bienestar emocional de su personal y continúa trabajando para brindarles herramientas que les permitan cuidar de su salud mental y ofrecer un servicio de calidad a la niñez y adolescencia que ha sido vulnerada.
Texto y Fotografías: Asael Díaz