La adolescencia es una etapa llena de entusiasmo, y las sonrisas de las y los adolescentes son las que contagian de alegría a cualquiera que las ve; así como sucedió en el festejo del Día del Niño en el que participaron más de 400 residentes de los hogares de Protección de la Secretaría de Bienestar Social.
La Dirección de Hogar Seguro Virgen de la Asunción organizó una fiesta llena de diversión con estaciones de juego, así como partidos de futbol para que las y los adolescentes tuvieran un día para recrearse, salir de la rutina y socializar.
“Para nosotros fue un reto tener a los 450 adolescentes de nuestras residencias, además del hogar contra la trata de la capital, y por ello estamos contentos. Tienen pocas oportunidades de socializar entre ellas y ellos, de esta forma, y por eso nos llena de alegría su participación”, expresó la directora de Hogar Seguro, Sandra López.
Entre la lotería, los juegos inflables, ponerle la cola al burro y saltar a la cuerda, esta también fue una oportunidad para aprender y recordar los derechos y el valor de las niñas, niños y adolescentes.
“Entre los juegos hubo uno en el que conté una historia y me gané a mi monita, ahora se llama Catarina Coquetz, y va a ser mi amiga”, relató Karen* (nombre ficticio), una de las adolescentes que junto con sus amigas disfrutaron los juegos.
Gustavo*, es otro de los adolescentes que participó en los encuentros de futbol, sueña con ser un portero o defensa y cada día le pide a Dios que su sueño se haga realidad. “Vinimos a jugar, a llenarnos de alegría, gozo, a hacer amigos, a dar una vuelta”, dijo entusiasmado después del partido en el que jugó.
El adolescente forma parte de una de las residencias de protección, en la que, según su testimonio, ha hecho cambios en su vida, con los que ahora comenzará a construir un nuevo futuro.
“Estando en la residencia he aprendido muchas cosas, cambié mi vocabulario, cambié mi forma de ser, cambié todo. Soy una persona diferente, ahora soy niño diferente y por eso le doy gracias a Dios y a quienes me cuidan”, puntualizó.
La jornada terminó con nuevas amistades y con la satisfacción de cada una de las y los adolescentes por tener un día cargado de energía y entusiasmo.
Texto: Cecilia García
Fotografías: Eduardo Mendoza