Cinco adolescentes de Casa Intermedia vivieron una experiencia única y transformadora al participar en una sesión de coaching con caballos. Esta técnica, que combina la interacción con equinos y la guía de un instructor, permite a los jóvenes explorar sus emociones, desarrollar habilidades de comunicación y fortalecer su autoestima.
Al inicio de la jornada, los jóvenes se mostraron temerosos y expectantes, ya que para algunos era su primer contacto directo con caballos. Sin embargo, a medida que avanzaban en los ejercicios de reflexión y autoanálisis, su seguridad y confianza fueron creciendo.







“Para la dirección de prevención terciaria es muy importante que este proceso, una terapia psicológica con coaching con caballos para los chicos que ya han recuperado su libertad o que aún están cumpliendo su sanción”, explicó Anabella Guzmán, Directora de Prevención Terciaria. “Esto es de gran importancia porque, debido a esta terapia, vamos a poder hacer cambios fundamentales en los chicos, como el carácter, trabajar su autoestima, fortalecer sus valores, lo que nos ayudará mucho a poderlos perfilar para un puesto laboral.”
Resultados positivos y cambios significativos
Guzmán también destacó los resultados positivos que se han observado en los jóvenes que participan en estas sesiones. “Con los chicos se ha logrado trabajar un cambio de conducta, algo positivo; además, se ha mejorado la autoestima y provocado cambios reales para mejorar la convivencia familiar y la interacción con sus compañeros”, afirmó.
Por su parte, Luis, uno de los adolescentes de Casa Intermedia que participó en el coaching con caballos, compartió su experiencia: “Gracias a las personas que nos han traído aquí y que aún confían en nosotros, es una experiencia nueva, estamos saliendo de la rutina. Son unas terapias únicas, no en cualquier lado o persona lo va a tener.” Luis también destacó los beneficios de la terapia con caballos para su bienestar emocional: “Todo el trabajo que se hace en Casa Intermedia, venir acá también, te desestresa, te cambia el chip. Allá tenemos más oportunidades, pero como esta actividad, es única, venir a compartir con los caballos, acariciarlos, llevarlos, sentir esa tranquilidad en ellos y que ellos también nos sientan tranquilos”, detalló.






Ékita continuará brindando apoyo y estas terapias a adolescentes que están cumpliendo una sanción en uno de los Centros de Privación de Libertad y otros que ya han recuperado su libertad, un trabajo en conjunto que se realiza junto con la Secretaría de Bienestar Social.
Fotografías: Luis Sajché
Texto: Asael Díaz