Las sanciones para los y las adolescentes en conflicto con la Ley Penal, no se enfocan solamente en un castigo, sino que, realmente, en el cambio de vida por medio de la educación, capacitación técnica y el desarrollo personal.
Para esto, existen programas como el de la Dirección de Medidas Socioeducativas, en el que se atiende a adolescentes que no tienen una sanción privativa, es decir, que no es necesario que estén en uno de los centros juveniles de privación de libertad.
En este, los adolescentes tienen seguimiento a su sanción, pero también actividades de formación y capacitación para que poco a poco construyan las bases de su futuro. Aquí es donde se incluyen los talleres de emprendimiento como el que se realizó en la sede de Medidas Socioeducativas de Quetzaltenango.
“Los adolescentes participaron en el taller de emprendimiento en el que aprendieron a hacer garnachas. No solo se trata de aprender a cocinar y degustar, sino que se les enseña a desarrollar negocios, identificar oportunidades y a crear conceptos innovadores”, explicó la encargada de la sede, Silvia Momotic.
Agregó que, ante todo, se busca que los adolescentes se empoderen, que sepan que tienen las capacidades necesarias para desarrollar todos sus proyectos de vida.
Texto: Cecilia García
Fotografías: Medidas Socioeducativas Quetzaltenango