La inclusión y la restitución de los derechos de la niñez y adolescencia con discapacidad forman parte de los logros y metas alcanzadas durante 2024, por el Departamento de Protección a la Niñez y Adolescencia con Capacidades Diferentes Severa y Profunda -ABI-, el cual atendió a una población de 80 jóvenes.
Desconcentración
Este programa brinda servicios de cuidado integral a niños y niñas con discapacidad, pero también a adultos que han cumplido la mayoría de edad, pero no tienen familia que se haga cargo de su cuidado. Es por ello, que este año se establecieron relaciones de coordinación con el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, -MSPAS- gracias a lo cual el Hospital Federico Mora ahora brinda atención ambulatoria a los jóvenes mayores de 18 años con discapacidad, así como la inmunización de niñas, niños y adolescentes abrigados en en el ABI.
Massiel Vasquez, directora de este centro, explica que ahora “El ABI no debe invertir en los medicamentos psiquiátricos y neurologicos que necesitan los pacientes adultos, pues ahora corren por cuenta del MSPAS, así como los exámenes médicos, de laboratorio, encefalogramas y electrocardiogramas. Ahora ya no sale de nuestro presupuesto, el cual ahora está dirigido exclusivamente para los niños, niñas y adolescentes que atendemos, según nuestro mandato”.
Accesibilidad
Por otro lado, la eliminación de barreras de accesibilidad fue posible gracias a la construcción de la rampa de acceso al segundo nivel de la residencia del ABI. Esta fue una donación del departamento de Asuntos Civiles de los Estados Unidos y el Cuerpo de Ingenieros de Guatemala que se encargó del diseño. Ello permitió hacer la separación de niñas, niños y adolescentes con los adultos del departamento, pues ante el acceso para toda la población atendida se limitaba al primer nivel.
Acceso a la educación
Un hito importante en la historia de ABI llegó en 2024, con la historia de Luis Alfredo*, un niño de 13 años, originario de Sololá con discapacidad grave, quien a pesar de los obstáculos se constituyó como el primer paciente de este programa en culminar la primaria y ser promovido al ciclo de educación media. “Para el ABI es un logro muy importante, ya que los NNA con discapacidad están siendo integrados a la sociedad y se están reintegrando sus derechos”, afirma Vasquez.
Asimismo, 29 niños, niñas y adolescentes, junto con 51 adultos, culminaran con éxito su ciclo escolar.
Inclusión
Asimismo, la población de ABI visitó por primera vez la playa y el mar, gracias a la apertura del centro recreativo “El Laberinto” en donde se les incluyó en distinas actividades, con lo que se logró la inclusión a la comunidad y al entorno, además de restituir su derecho a la recreación.
Fortalecimiento de las capacidades del equipo
Por último, Vásquez resalta que todos estos logros han sido posible al compromiso del equipo del ABI que siempre se muestra dispuesto a servir a la población. Por ello, también han fortalecidos sus capacidades con cursos sobre primeros auxilios y patologías especializados en los casos que se llevan en el departamento, como uso correcto de sillas de ruedas. También se cuenta con el acompañamiento de la oficina Nacional de prevención de la tortura, la cual brinda capacitaciones al personal con base a las necesidades del centro.