La vida de la pequeña Fátima cambió al ser acogida por una Familia Sustituta, luego que en octubre pasado, circulara un video en el que se le veía sola sobre una terraza, situación por la que fue rescatada por la Procuraduría General de la Nación -PGN- y tras la pronta intervención por parte del Programa de Acogimiento Familiar Temporal, de la Secretaría de Bienestar Social –SBS- se evitó su institucionalización.
Este próximo 14 de enero, el destino de la pequeña podría decidirse, ya que en la última audiencia a la que acudió su madre biológica, el juez ordenó que asistiera a Escuela para Padres y le autorizó convivencias para restablecer el vínculo. Sin embargo, previo a tomar una decisión, también se ordenó una investigación para establecer si constituye un recurso idóneo.
Además, Fátima deberá ser examinada por personal del Instituto Nacional de Ciencias Forenses –INACIF- para establecer su estado de salud general y deberá asistir a terapia del habla, en el Centro Universitario Metropolitano, mientras continúa bajo abrigo y protección de la familia sustituta que la acogió ya hace más de un mes y con lo que se ha logrado el restablecimiento de sus derechos.
Esperanza, madre temporal de la niña, la describe como bien portada y cuenta que cuando se la entregaron por orden de juez, estaba casi toda cubierta de una especie de pintura de aceite, su cabello estaba hecho una melcocha y tenía un lado de su rostro golpeado.
Dice que al principio la nena no hablaba, pero tras 15 días de estar bajo su cuidado empezó a decir “papá” y “mamá” y además, le gusta cantar. “Ella convive todos los días con mi nuera, mi hijo y mis dos nietas; no llora, no hace berrinches y le encanta jugar con las niñas. Ha llegado a alegrar el hogar”, indicó Esperanza, quien fue acreditada en el programa de Familias Sustitutas en 2018.
Angie Villabos, jefa del Departamento de Acogimiento Familiar Temporal, Familias Sustitutas, de la SBS, informó que los beneficios del programa se han visto reflejados en la pequeña Fátima. “Hay muchas situaciones que han hecho que su desarrollo se haya detenido. Sin embargo, todos tenemos derecho a vivir en una familia, aunque fuera sustituta y esto ha ayudado a que la nena tenga grandes avances en su desarrollo”, expresó.
Villalobos destacó que desde 2018, con apoyo de las actuales autoridades de la SBS se implementó una nueva estrategia para aumentar el número de familias acreditadas al programa, y de 20, este año ascendió a 118, lo que evita la institucionalización de Niñas, Niños y Adolescentes –NNA-. Además, este 2019 se logró que 70 menores de edad fueran acogidos por 60 familias diferentes, ya que algunas albergan a más de un NNA.
“A todos los casos se les da seguimiento psicosocial, control médico, educación cuando lo requieren y tienen acompañamiento en el que se le prepara al niño para el momento en que sea reintegrado con su familia biológica, porque la finalidad del Programa no es que se queden en los hogares temporales. Si no se logra la reintegración se declara su adoptabilidad y ya es el Consejo Nacional de Adopciones el que se encarga de encontrar otra familia”, finalizó Villalobos.
