Después de varias semanas de ensayos y preparación, las adolescentes del Centro de Privación de Libertad para Mujeres -Cejuplim- Gorriones por fin subieron al escenario y presentaron la obra con la que rindieron honor a las operadoras de justicia en el Día de la Jueza.
Como parte de la metodología Ocio Cero, las adolescentes y jóvenes participan constantemente en talleres y actividades con las que conmemoran fechas importantes, por ello decidieron honrar a las juezas con la puesta en escena que planificaron.
“Hablamos acerca de la rutina en un juzgado, de lo que conlleva un proceso judicial y así fue como nació esta obra, al estilo de un monólogo. Así fue como ella pudieron expresar lo que significa la justicia y el papel de las juezas en la sociedad”, explicó la psicóloga Glenda Zamora.
La preparación de la obra incluyó ensayos, aprendizaje de diálogos, pruebas de vestuario e incluso de efectos especiales que las residentes de Gorriones se encargaron fabricar para compartir con sus compañeras y educadoras.
Desarrollo de habilidades
La psicóloga Zamora comentó que además de aprender sobre las funciones de las juezas, este tipo de actividades también tiene influencia directa en la evolución de destrezas que contribuyen a impulsar el potencial de las jóvenes y adolescentes.
“Al principio no comprendían bien cómo moverse, cómo hablar, cómo expresarse, pero conforme estuvieron en los ensayos vimos un gran crecimiento. Hay adolescentes que no imaginamos que tendrían un potencial tan grande, especialmente en la actuación”, puntualizó.
“Nos sentimos nerviosas, pero estábamos muy emocionadas porque normalmente las juezas que nos han tocado en nuestros procesos han sido muy correctas, responsables y eso era lo que queríamos interpretar”, explicó Karen* (nombre ficticio), una de las actrices.
Texto y fotografías: Cecilia García